Capitulo 16: Borrachera

Dani me ha dejado descolocada con esta llamada... Pasamos el dia genial, celebrando el cumpleaños de nuestra aimga Cris por todo lo alto, ella está feliz y es lo que queríamos, además aún queda lo mejor, y ella no lo sabe!
Ya son las 6, nos empezamos a arreglar. Yo llevo un vestido marron oscurito con un detalle beige, a conjunto con los zapatos que son del mismo color. Y el pelo recogido, como me enseñaron a hacerme las peluqueras del programa. Mis amigas van guapísimas, Cris lleva un vestido que le hemos regalado nosotras. Estoy ansiosa porque llegue esta noche, tengo muchas ganas de salir de fiesta, y además si sé que Dani va a estar ahí, lo vamos a pasar genial!
Son las 9 menos cuarto, estamos llegando a donde quedé con Dani, ellos todavía no están.
- ¿A que esperamos? -me pregunta Cris
- A nada, es que me duelen los pies, esperaros un momentito. -miento yo. Dani me hace una perdida, eso es que ya estan por aquí.
- Chicas ahora vengo. Tengo una sorpresa, giraros y no mireis hasta que yo lo diga.
Veo a Dani, que guapo está!
- Madre mía, Annita, estás preciosa. -me dice él con cara de asombro y me da un beso en la mejilla. Yo saludo a sus amigos, que ya los conocía.
- Chicas, ya está. -digo yo. Se giran todas y se quedan sorprendidas, de eso se trataba, estan encantadas. Nos vamos a cenar a una pizzería, a todos nos encantan las pizzas. Durante la cena Dani y yo nos miramos mucho, me encanta como me mira, como si me comiera con los ojos. Y como estamos sentados uno frente al otro, jugamos con nuestras piernas debajo de la mesa. Mis amigas cuentan anécdotas de toda nuestra vida, esas cosas que no quieres que nadie sepa que las has hecho, pero total a ellas que más les da, es Dani el que me mira y me hace señales diciendome "estabas loquisima" y yo la que me muero de vergüenza.
Estamos ya en una discoteca, empezamos a bailar, ya llevo tres cubatas y tengo el puntillo así que me suelto y comienzo a bailar con mis amigas, y cojo a Dani, que no se mueve mucho, pero yo me pongo con él, un poco más apartados de la gente. Aprovecho para preguntarle por lo que pasó antes por telefono.
- Dani, ¿por qué hoy te pusiste así por telefono?
- Anna, no quiero que te enfades, es por Lara. El otro día, cuando vio que nos despedimos y que me hiciste el masaje, se enfadó mucho. Dijo que no entendía que me lo hicieras tú estando ella y me decía que parecía que yo sentía algo por ti. Me dijo que no podría seguir conmigo si veía eso, que yo quería tener algo contigo, por eso me aleje de ti durante el programa, para que ella no viera nada. Alomejor con ella puedo conseguir una relación estable, y no quiero que nada lo estropee, ¿lo entiendes? -Maldita Lara, ahora la odio, nos quiere separar y lo peor es que lo está consiguiendo.
- No me imaginaba que fuera así, pero tampoco me imaginaba que tú te dejaras manipular de esa manera, tu veras que pesa más, si una posible relación con ella o nuestra amistad. De momento ya veo que has escogido. -le digo yo, que no me corto un pelo.
- Bueno, ahora no hablemos más de eso, vamos a disfrutar. ¿Bailamos? -me pregunta él
- Pero si te da vergüenza. -le respondo yo.
- Pero cuando te miro, siento que no hay nadie más a nuestro alrededor, y contigo me siento libre, sin miedos ni vergüenzas. -me mata con su respuesta.
Empezamos a bailar, cada vez estamos más animados y más bebidos, todavía no estoy borracha pero voy a parar un poco el ritmo porque me queda poco. Dani está un poco peor que yo, creo. De repente ponen una cancion lenta y Dani y yo nos miramos. Él me abraza y empezamos a bailar lentos.
- Gracias. -me susurra al oido
- ¿Gracias por qué? -le pregunto yo
- Por estar aquí, por dejar que te abrace y baile contigo, no sé como puedo tener tanta suerte. -yo no sé como responder, sólo se me ocurre darle un beso en el cuello, un beso suave con sentimiento.
Estamos mucho rato más en la discoteca, lo estamos pasando genial, ya es muy tarde, está apunto de amanecer, mis amigas que también van contentillas cogen un taxi y yo les digo que en un rato voy a casa. Dani esta bastante borracho, y sus amigos tambien, ellos se cogen un taxi por su camino, y yo decido llevar a Dani a su casa. Entramos, lo tiene todo muy bien, ¡que ordenado es! Lo llevo a la cama le ayudo a desvestirse, yo también estoy algo borracha pero menos que él. Todo nos hace gracia, me he quitado los zapatos y él a cogido uno y yo otro y nos hemos puesto a hablar con el zapato en la oreja como si estuvieramos hablando por telefono. Está en calzoncillos, le voy a coger un pijama.
- No, cari, me quedo así. -me dice él, que me quiere matar con ese cuerpo que me encanta, hacía tanto que no le veía en calzoncillos, y encima en su cama, todo me recuerda a nuestra última vez.