lunes, 22 de agosto de 2011

Capitulo 56: Lo necesitaba

Sonrío tímidamente, haciéndole saber lo feliz que soy en este momento y las ganas que tengo de que me haga sentir unida a él. Me acerco a él un poco más, nuestros labios están a punto de rozarse, y como veo que él no se lanza, allá voy yo. Recorto toda la distancia que en este momento nos separaba y le beso con deseo, sabiendo que ahora estos labios son solo míos y no los voy a compartir con nadie. Le rodeo el cuello con mis brazos mientras él me tiene cogida de la cintura, pronto deja caer su mano debajo de mi vestido, acariciándome con suavidad la zona más baja de mi espalda y obviamente haciéndome estremecer. Le empujo poco a poco hasta el sofá, parece que soy yo la que lleva la iniciativa hoy, y parece que le encanta. Hago que se siente y me siento yo encima, nos besamos, cada vez con más pasión, su camiseta me molesta, no tardo en quitársela. Ahora ya tiene sus dos manos debajo de mi vestido, me acaricia esta vez todas las zonas de mi espalda, desde arriba hasta abajo, jamás sentí tanto con una simple caricia, será porque en las yemas de sus dedos va toda su pasión, y así me hace sentir mil emociones. Parece que el vestido le comienza a incomodar así que no duda en quitármelo, pronto estamos en ropa interior y en la misma posición, seguimos besándonos, le muerdo el labio, siempre le gustó, por eso lo hago. Cada vez presiona más sus dedos contra mi espalda, sé que ahora siente que soy suya y que está disfrutando de ello. Me desabrocha el sujetador, y cansado de tenerme encima decide cambiar los papeles y tumbarme para tumbarse sobre mí. Sentimos como nuestros cuerpos se tocan, y cuando ya no aguantamos más nos quitamos la última prenda de ropa que nos queda. Y disfrutamos, ya lo dije, cada vez es mejor que la anterior pero creo que ésta es inmejorable...
- Dime que esto sólo me lo haces a mí... -me dice mientras me hace el amor con más ganas que nunca.
- Sólo a ti, sólo contigo me entrego así. -le beso el cuello, esta sensación es indescriptible...
Se tumba a mi lado, pone su mano en mi vientre y me acaricia alrededor del ombligo.
- Lo necesitaba... -me dice él.
- ¿El que? -pregunto curiosa.
- Esto, tenerte aquí, en mi cama, una vez más, y sin preocuparme sobre si tu novio se entera o no. No quiero compartirte con nadie nunca más...
- No me vas a compartir con nadie, mi vida. -me giro hacia él, nos miramos fijamente, sonrío y me devuelve la sonrisa, y nos besamos dulcemente. Nos tumbamos un rato, pero sin llegar a dormirnos, nos acariciamos mutuamente disfrutando de esto que tenemos.
- Quiero llevarte a cenar a un sitio. -me dice incorporándose y agarrándome de la mano.
- ¿A dónde? -pregunto incorporándome yo también.
- Tu vístete que cuando termines nos vamos.
Le hago caso, y cuando termino de vestirme nos vamos en su coche. No sé bien bien a dónde vamos, pero parece que ya estamos llegando.
Nos paramos en la puerta de un restaurante, un restaurante que me suena muchísimo pero todavía no sé de qué. Le miro extrañada, y me sonríe. Nos sentamos en una mesa apartada de la gente, para evitar encontrarnos con alguien y que nos vean.
- Dani... Este sitio me suena mucho... -le digo después de habernos sentado.
- Normal, es que no es la primera vez que vienes aquí... -me dice poniendo su mano encima de la mano que tenía yo puesta sobre la mesa.
- Mm... Creo que sé donde estamos... -digo pensativa.
- Sí, mi niña. Aquí es donde te traje la primera vez que quedamos, hace mucho tiempo...

6 comentarios:

  1. ES-PEC-TA-CU-LAR!! Con todas las letras!! Con esto ya lo digo todo... me ha encantado, de verdad!

    ResponderEliminar
  2. Ooooohhhh. Aish, si es que es súper bonito ^^

    ResponderEliminar
  3. me enccanta esta historia, confieso que me tiene enganchada!

    ResponderEliminar
  4. Me encantaaaaa :D Siguiente, estoy super enganchada ! :D

    ResponderEliminar
  5. Entre un historias y las otras no les va a llegar el sueldo para preservativos :x

    ResponderEliminar