Capitulo 59: Es diferente

Le miro sorprendida, no me esperaba que me dijera eso, creo que voy a morir de felicidad...
- No me mires así... Te quiero Anna, pero no te quiero como a los demás, no te quiero como a mis amigos, ni como a mis padres, ni como a mi hermano, no te quiero como a otra chica... Te quiero de una manera diferente, de una manera en la que nunca he querido...
- Dani, no sabes lo feliz que me haces, con esas dos palabras he sentido mi alma llena de felicidad, créeme que es la primera vez que me pasa...
Nos besamos apasionadamente, creo que nadie podría sentirse mejor que yo ahora, que él me diga esto así y luego me bese como me está besando... Ni en mis mejores sueños podría ser más feliz.
Después de demostrarnos todo lo que sentimos con miles de besos, decidimos retomar el camino hacia alguna heladería, esta vez por otro camino para evitar otro encontronazo con esa...
Llegamos a una heladería grande, y me pido mi helado preferido, Dani también. Hay mucha gente, nuestra idea de ser discretos parece que no va a poder cumplirse...
- Eh chicos! Anna y Dani, ¿estáis juntos, verdad? -nos pregunta una fan.
- Eh, no no, hemos quedado como amigos. -dice Dani.
- Pues es una pena porque hacéis muy buena pareja. -nos dice otra fan.
Los fans parecen no habérselo creído, pero después de hacernos fotos y firmar autógrafos nos dejan tranquilos y seguimos comiendo el helado.
- Vaya, parece que la gente quiere que estemos juntos... -dice Dani después de estar un rato pensativo.
- Sí, fueron ellos los que pidieron nuestro beso el día de San Valentín, ¿te acuerdas? -le pregunto.
- Cómo para olvidarlo, desde ese beso me dejaste atontado, no sabía que me pasaba pero estabas tú todo el día en mi cabeza... Bueno...
- ¿Bueno? ¿Qué pasa? -le pregunto extrañada.
- Qué desde antes de probar tus labios, desde el primer día que te conocí creo que ya no podía sacarte de mi mente...
- ¿De verdad? -pregunto asombrada, me cuesta creerle.
- Claro, mírate, ¿cómo no voy a pensar en ti a cada segundo?
Le sonrío, debo de tener una cara de tonta ahora... Pero bueno, él también está feliz y con una sonrisa tonta en la cara. Terminamos de comer los helados y vamos hacia el coche.
- Me llevas a casa, ¿vale, cariño? -le digo después de montarme en el coche.
- ¿No me dejas estar un ratito más contigo? -me pone carita de pena.
- Mañana hay programa mi vida, será mejor que cada uno vaya a su casa a descansar.
- Bueno, como quieras, preciosa.
Pone el coche en marcha y me deja en la puerta de mi casa. Como siempre que estamos rodeados de gente, Dani me da un beso en la comisura de los labios. Me bajo del coche con ganas de que me bese todavía más, pero él ya se aleja y yo ya tengo que ir a casa.
Me pongo el pijama y me tumbo en la cama, abrazo a mi peluche mientras lo miro, me acerco más a él y lo huelo.
- Mmm, todavía huele a ti... -lo digo en voz alta, como si Dani pudiera escucharme. Y me duermo pensando en todo lo que me está pasando, en lo feliz que me estoy sintiendo y rezando porque nada cambie...