martes, 30 de agosto de 2011

Capitulo 66: Cobarde

Empieza el programa y miro mucho a Dani, le necesito pero parece que él a mi no porque me esquiva también con la mirada. Termina el programa y voy directa a Dani.
- ¿Puedes hablar ahora? -le pregunto seria.
- Sí, ven a mi camerino.
Le hago caso y en pocos minutos estoy en su camerino, sentada en su sofá esperando a que venga. Y aquí llega, está guapísimo pero serio...
- ¿Que pasa, Dani? -le pregunto después de que se siente en la silla.
- Anna... He estado pensando mucho, desde que me fui de tu portal hasta ahora...
- ¿Y? ¿Que pasa!!? -pregunto ya impaciente.
- Pues que no... Que no puedo con esto, que no sirvo. Lo he intentado pero esto no está hecho para mí...
- ¿De que hablas? -me está asustando.
- De lo nuestro, se acabó Anna...
Siento que me derrumbo con estas palabras, ¿que mierda pasa? Dani no me mira, está mirando al suelo con sus manos apoyadas en las rodillas.
- ¿Qué? ¿Qué pasa Daniel? -no me responde- Mira, hoy te iba a decir que te perdonaba, que me daba igual si me habías mentido porque ayer te creí y quería estar bien contigo. Pero esto no me lo esperaba, que me dejes tu a mí... Eres un cobarde, siempre lo has sido y por tu cobardía vas a perder muchas cosas, a mí la primera. Lo intenté, a pesar de lo que me hiciste, intenté olvidarlo pensando que eras una nueva persona que no me dejarías otra vez, pero no... No puedes, eres incapaz. -Dani sigue mirando al suelo y yo consigo hablar sin soltar ni una lágrima y sin parecer nerviosa- Mírame, ten por lo menos ese valor, el valor de decirme a la cara que nunca me has querido. -con esta frase consigo que Dani levante la mirada del suelo, aunque no me mira a los ojos- Dejé a Miki por ti, dejé una relación de casi dos años por ti Dani, y tú vuelves a ser como aquella vez, vuelves a dejarme. No vales la pena, no te mereces nada.
Salgo de su camerino, noto como Dani sigue sin mirarme, cojo rápidamente las cosas de mi camerino y me voy corriendo a mi casa. Entro y una vez en casa me derrumbo, todo lo que no he llorado estos días lo suelto ahora, sentada en el suelo apoyada en la puerta, llorando sin parar, llorando por... No merece ni que lo nombre. Siento que me quedo vacía, no entiendo cómo una persona que me ha llenado tanto en pocos días es capaz de hacerme tanto daño... Pasa mucho rato y sigo llorando, le iba a perdonar y mira... Ahora es él el que me deja a mí, una vez más... Y así empiezo a recordar todo lo que nos pasó hace casi 3 años...

4 comentarios: